El baile de la impotencia.
El collar de la palabra acertada.
El agarre del golpe en la mesa.
El paso certero dado a un lado.
El silencio gritado
El grito adormecido.
La mirada puesta más allá
Para no derretir glaciares
Para no encender más fuego.
El giro airado como fuga.
El punto y aparte en una coma.
El acento trasladado.
La nota fugada,
reencontrada
en otra partitura.
La impotencia
que no manda a la mierda...
Crea paralelos paisajes
para desviar los arestos.
Se libera bailando en las nubes
paseando por caminos más ciertos.
Anna B Pellicer
28 de agosto de 2019
La impotencia
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