A veces es necesario
darse la vuelta
como un calcetín.
Desnudarse por dentro,
remendar antigua heridas
y abrirse de nuevo
a cuanto nos rodea, sin
miedo.
A veces es importante
descubrirnos,
comprendernos
vivir, armonizando el
entorno.
Permitiendo que fluya la
vida,
consintiendo que fluyan
las vidas.
A veces pensar y sentir
tienen que acomodarse
para darse un abrazo.
Hacer una tregua
y pactar nuevas reglas.
A veces vivir en la
cuerda floja
no tiene mayor sentido, si
descubres
que lo más complicado ¡Era
bajarse!
Pasamos la vida..
Manteniendo alejados a
fantasmas
que suelen llevar las
riendas
a la hora de tomar
decisiones
¡Rompamos ese círculo
viciado!
Reflexionemos…
¡Jamás ha funcionado!
A veces…
O quizás no.
Anna B.Pellicer
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