Todo empieza
con una sensación
con una sensación
¿Podría ser?
Olor a mar...
Respiro profundo
Un guiño provocador
que el horizonte
deja escapar.
que el horizonte
deja escapar.
¿Podría ser?
Una barca meciéndose
mientras su vela
sonrie por las cosquilas
de un viento seductor.
¿Podría ser?
sonrie por las cosquilas
de un viento seductor.
¿Podría ser?
Un timón de madera
que conversando con el alma
le invita a dejarse llevar.
quizás...
¿Podría ser?
Mi alma cómplice
Mi alma cómplice
de los sueños que guardamos,
y que no teme al despertar
del camino que se cae
del borde de nuestros labios.
Ella coloca en orden el pasaporte
que guardamos en la cara oculta
del corazón y libera los pasos
que atamos con excusas de cordura.
Busco la brújula saboteada,
quito el imán que hacia trampas
falseando la lectura del mapa
donde planeada una nueva excursión.
donde planeada una nueva excursión.
Emerguen esos puertos
que no solo sentimos
¡Ahora sabemos que existen!
¡Ahora sabemos que existen!
Quizás todo se inicia
con una sensación
con una sensación
que nos recuerda
un destino que llamó vida
un destino que llamó vida
Anna B. Pellicer
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