Estos días ha sido increíblemente refrescante ver las plazas de nuestras ciudades llenas de corazones pidiendo, clamando un cambio de los gobernantes. Pienso que nunca ha quedado tan patente la gran viga ocular que tienen nuestro políticos y muchos de los periodistas. Ojala no consigan desvirtuar esa nueva energía que ha empezado a movilizarse. Desde mi pequeña parcela emocional les doy las gracias a cada una de las personas que han estado y que siguen estando porque me han regalado el recuerdo de la dignidad del ser humano. Los valores de una sociedad hormiga han de volver a activarse, todos juntos trabajando, apoyando, ideando, compartiendo, despacito pero sin pausa...Como decía Víctor Jara "Canto que ha sido valiente, siempre será canción nueva". O Graham Greene. "Intento comprender la verdad, aunque esto comprometa mi ideología".
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